Alejado de la Copa Libertadores de América luego del escándalo ante el Atlético Mineiro, lejos en el campeonato local que, de no mediar algo extraño, culminará en manos de River y aún sin poder clasificarse a la Libertadores del próximo año ya que marcha quinto, más allá de su chance vía Copa Argentina que lo encuentra en semifinales, Boca ya empieza a delinear su futuro.