Al mellizo lo tienta la Libertadores

El director técnico de Boca Juniors, Guillermo Barros Schelotto, confió en que “se pueden agrandar las posibilidades” en la Copa Libertadores de concretarse la clasificación para los octavos de final, a la que su equipo se acercó con la victoria ante Bolívar de Bolivia en La Bombonera.

Durante una entrevista concedida a Télam el día después de ese triunfo, Guillermo avisó que “en los mano a mano” de la fase final “empieza otra Copa”, aunque fue cauto al remarcar que primero deben lograr ese objetivo y que, para ellos, asumirán “un partido clave” ante Racing en Avellaneda, el miércoles próximo. Contrariamente, el DT xeneize asumió que Boca “está en una situación difícil en el campeonato local”, cuyo título defiende, debido a que el líder de la Zona 2, Lanús, “se escapó a ocho puntos”. “Tenemos que sumar muchos puntos para llegar al menos hasta el segundo lugar y poder clasificarnos a la Copa del año que viene. Ahora, nos toca Tigre y trataremos de ir con lo mejor, aunque eso no significa que jueguen todos los que lo hicieron contra Bolívar. Intentaremos dar pelea en el torneo, pero sabemos que Lanús, Rosario Central y Godoy Cruz tienen un plus sobre el resto”, aceptó.

“En la Copa, nos tocó un grupo difícil con Racing y un rival con altura (Bolívar) y ahora tenemos un partido clave en Avellaneda, para el que trataremos de cuidar algunos jugadores con la intención de que lleguen lo mejor posible. La Copa es muy pareja, hay 16 equipos que ya fueron campeones. Todos los argentinos están teniendo una buena actuación y creo que van a pasar. Nosotros sabemos que desde octavos la cosa cambia y se nos pueden agrandar las posibilidades”, entendió.

Con la victoria ante Bolívar, Boca quedó en el segundo puesto del Grupo 3 detrás del líder Racing, aunque lo más positivo para su entrenador fue el nivel de juego mostrado por su equipo. “De a poco, vamos encontrando el rendimiento que busco, hallé un grupo con muchas ganas de salir de la situación en la que estaba”, dijo.

Barros Schelotto, de 48 años, lleva 37 días en la dirección técnica de Boca Juniors, a la que llegó en reemplazo de Rodolfo Arruabarrena por la mala campaña del equipo en el inicio de la competencia oficial de este año. “No me gusta referirme públicamente al ciclo anterior”, aclaró sin ánimo de polemizar con su antecesor.

“Con Unión y Rafaela en el torneo local también se vieron cosas de lo que busco y quiero. El equipo fue protagonista, buscó siempre y tuvo contundencia a pesar de no contar con un número 9 fijo. Carlos (Tévez) está cumpliendo muy bien esa función, él es un jugador que puede desempeñarse en cualquier lugar de la cancha”, apuntó.

Después de sus elogios al “Apache”, Guillermo desmintió que tuviera una relación tensa con el delantero desde la época que compartieron plantel bajo la dirección de Carlos Bianchi. “Desconocía esa versión, con Carlos fuimos compañeros y amigos, fui varias veces a visitarlo cuando él vivía en Londres. Siempre tuve una excelente relación con su familia. Ahora, lo veo muy maduro, con la experiencia de haber vivido un montón de cosas y también muy consciente de lo que cree que es mejor para todo el grupo”, consideró. Luego, Barros Schelotto agradeció el “respaldo de los dirigentes” que lo fueron a buscar para tomar las riendas del equipo tras la salida del “Vasco”. “Es una tranquilidad que me hayan elegido y estén convencidos. Daniel (Angelici) me pidió que trabajara tranquilo y me dijo que tenía todo a disposición. Puedo manejar mi trabajo como yo quiero y tomar las decisiones que yo piense que son las mejores para el grupo y el club”.

Finalmente, se refirió a la experiencia personal de volver al club de la Ribera nueve años después y en otra función. “Este mundo Boca es muy distinto al que yo veía como jugador. Han crecido la cantidad de medios de comunicación y ahora existen las redes sociales, eso hace que exista mayor presión. Lo de hoy es todo nuevo, eso influye sobre el jugador y a veces lo condiciona”, contó.