Paolo Guerrero vuelve a sonar en Boca

La noticia de que Paolo Guererro dejó de ser jugador de Internacional retumbó en el Mundo Boca. Después de tres temporadas en el conjunto de Porto Alegre, donde convirtió 32 goles en 72 partidos, el delantero rescindió su contrato de mutuo acuerdo con el club e inmediatamente volvió a sonar en el Xeneize, que lo quiso hace no mucho tiempo atrás.

Riquelme negoció por la llegada de Paolo Guerrero a Boca en 2020

Si bien por estas horas el Depredador no aparece en el radar del Consejo de Fútbol, lo cierto es que no sería una utopía que el conjunto de la Ribera haga un intento por contratar sus servicios, sobre todo porque es un viejo anhelo de Juan Román Riquelme, quien ya fue a la carga por él a principios del 2020, ni bien asumió la nueva gestión junto a Jorge Amor Ameal.

"Sabemos que hoy en día si Boca va a buscar un jugador se disparan los precios. Yo creo que todos coincidimos en que Paolo es uno de los mejores 9 de Sudamérica", había manifestado Román en noviembre del 2019, semanas antes de ganar las elecciones y convertirse en el vicepresiente segundo del club.

Pero las declaraciones del ídolo Xeneize fueron más allá, y reveló que el propio Guerrero le había confesado su deseo de jugar en Boca: "Él me llamó y me invitó a jugar un partido a beneficio. Después yo le pregunté si le gustaría jugar en nuestro club, me dijo que sí y que le gustaría jugar en La Bombonera".



Con este conocimiento, una vez que llegó a las oficinas de Brandsen 805 a fines del 2019, Román puso manos a la obra y fue a buscar al delantero centro de jerarquía que quería para suplir la salida de Darío Benedetto meses antes. No obstante, cuando las negociaciones parecían "avanzadas" a principios del 2020, según manifestó el vicepresidente tercero Roberto Digón en aquel entonces, poco a poco empezaron a enfriarse y el pase terminó cayéndose.

La clausula de salida de aproximadamente 4.5 millones de dólares que tenía el peruano en el Inter de Porto Alegre y el elevado salario que percibía, hicieron que el Xeneize cesara en las tratativas y finalmente el goleador se quedara en tierras brasileñas.

Paolo Guerrero volvió sonar en Boca hace pocos meses

Las versiones sobre un posible arribo de Guerrero a La Bombonera se reflotaron en abril de este año, cuando su representante Vinicius Prates avisó que desde el elenco Colorado no se habían comunicado para renovarle el contrato que vencía en diciembre. En esta oportunidad, no fueron más que rumores. Es que si bien Boca había cedido a Ramón Ábila, y Franco Soldano no lograba afirmarse en el puesto, la posibilidad de contratar al ex Bayern Munich no volvió a barajarse y, por ende, no hubo ningún sondeo al respecto.

Lesiones, pocos partidos y rescisión de contrato con el Inter: el año de Paolo Guerrero

Mediante un comunicado oficial, internacional anunció este miércoles que Guerrero dejaba de ser jugador del club por decisión de ambas partes. Según trascendió, la combinación entre la poca actividad que venía teniendo el Depredador por sus reiteradas lesiones y el hecho de no ser una prioridad para el DT Diego Aguirre, fueron los determinantes de este desenlace.

En el Brasileirao 2021, el peruano de 37 años apenas pudo disputar nueve partidos y convertir un gol, mientras que en la Copa Libertadores solamente jugó 14 minutos ante Always Ready. En total, contando el Campeonato Gaucho, sumó 16 encuentros y anotó dos tantos. El porqué de su escasa participación radica principalmente en la lucha constante contra los malestares en su rodilla que padeció a lo largo de todo el año.

El origen de sus inconvenientes físicos se encuentra en agosto del 2020, cuando sufrió la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, lesión que lo mantuvo afuera de las canchas durante siete meses. Tras regresar en marzo de este año y jugar un puñado de compromisos, una tendinitis en la misma rodilla lo volvió a golpear, incluso impidiéndole jugar la Copa América con la Selección de Perú, con quien apenas logró estar en cinco cotejos de Eliminatorias.



En julio retornó a la acción y fue el lapso de tiempo donde más minutos pudo tener, pero igualmente fue poco utilizado por Aguirre. Sin embargo, las molestias en la misma zona volvieron a aparecer en octubre: posteriormente a la victoria de su seleccionado ante Chile, fue desafectado de la convocatoria.

“Primero tengo que resolver el tema de mi rodilla, que parece que no me quiere dejar jugar. Estoy manejándolo con calma. Tengo que tener paciencia. Para mí es importante estar jugando. En mi equipo no lo hago y me deja triste. Pero bueno, seguir trabajando”, confesó Guerrero, quien ahora irá en busca de un nuevo destino, donde intentará recuperar su mejor versión física y futbolística.