Edwin Cardona, con sed de revancha

Pero si se mantiene la esperanza, tarde o temprano las cosas se dan para bien. Así le sucedió a Edwin Cardona. No se cansó de insistir por volver a Boca Juniors, y en las próximas horas será anunciado como refuerzo en esta atípica temporada. Eso sí, con el único objetivo de sacarse la "espinita" tras su primer capítulo.

A mediados de 2017 su nombre se oficializaba en la "Casa Amarilla". Una vez llegó, Cardona no soltó la titular. Era una pieza clave del elenco de Guillermo Barros Schelotto. De hecho, su debut fue con gol. El 14 de agosto, por la Copa Argentina, Edwin anotaba el segundo tanto de Boca ante Gimnasia y Tiro de Salta, en la goleada por 5-0.

Los meses que le seguían eran perfectos. Incluso, de las 46 apariciones con Boca, el antioqueño fue titular en 36 oportunidades. Sin embargo, no todo es color de rosa. De un momento a otro, Cardona fue borrado del mapa de citas importantes, lo que causó un cortocircuito con el entrenador argentino y con sus alrededores. A tal punto se molestó Cardona que era insostenible esa situación. La que reveló días después de su salida.

"Nunca entendí por qué dejé de jugar. Las razones del entrenador de ese tiempo fue que habían jugadores, que estaba probando su equipo y que todos teníamos posibilidades, pero nunca me dieron la razón de por qué me sacaron. Más allá de que quería quedarme, nunca nadie se comunicó conmigo o mi representante, para quedarme y tener esa revancha que ahora tienen mis compañeros. Me hubiera gustado quedarme en Boca. Nunca hablaron con mi empresario ni con nadie. La primera opción era Boca. Me quedé tiempo parado, aguanté hasta el 27 de diciembre, cuando preguntó Pachuca. No me podía quedar sin el pan ni el queso. Lo único que me comunicaban era cuándo iba para la tribuna", expresó en aquel entonces.

Pero nadie conoce su destino. Y aunque tuvo unas destacadas actuaciones en el Pachuca y el Tijuana mexicano, la vida ha vuelto a poner a Edwin Cardona en Boca Juniors. En esta ocasión, con una mente más madura y con ganas de sacarse ese "clavito" que le hizo salir por la puerta de atrás, pero que espera borrar cuanto antes con ¬ese espíritu de guerrero que no le abandona.