Boca tiene que renovar dos contratos en diciembre y apunta a extenderle a dos juveniles

Ya finalizada la temporada y con el plantel de vacaciones, en Boca trabajan con vistas al 2023 y además de analizar las posibles incorporaciones la dirigencia se prepara para resolver algunos temas contractuales, principalmente los casos en los que los vínculos se vencen el 31 de diciembre, como sucede con Carlos Zambrano y Diego González. Además, apuntarán a extenderle a otros dos juveniles.

El defensor peruano de 33 años en un principio parecía tener un pie afuera de cara la próxima temporada, ya que en algunas oportunidades había manifestado la posibilidad regresar su país por cuestiones familiares. Sin embargo, desde hace unas semanas existen conversaciones entre las partes y está todo encaminado para que ponga el gancho.

El zaguero, que se asentó como titular tras la salida de Carlos Izquierdos es muy valorado por el vicepresidente Juan Román Riquelme, y fue él mismo quien se comunicó con el defensor para convencerlo y expresarle su deseo de que continúe en el club de La Ribera.

En tanto, el caso del Pulpito es diferente ya que en el último tiempo las lesiones lo han marginado y le han impedido lograr continuidad. En este 2022 jugó apenas siete partidos -solo tres como titular-, seis por la Copa de la Liga en el primer semestre del año, y el restante en la última Liga Profesional. Por el momento, desde el Consejo de Fútbol no han avanzado para renovarle.

A esto hay que sumarle el caso particular de Agustín Rossi, quien quedará libre en junio de 2023 y aún no respondió la última oferta que recibió para seguir en el club. A su vez, en las últimas horas surgió la información de que Flamengo de Brasil negocia para llevarselo sin cargo, aunque podrían intentar sacarlo en enero negociando con Boca.

Los dos juveniles que Boca quiere asegurarse

Por otra parte, en Brandsen también apuntan a renovarles y mejorarles los vínculos a dos juveniles, como ha sucedido con muchos otros. Se trata de Marcelo Weigandt y Valentín Barco. Ambos defensores son representados por Adrián Rouco y desde el club se reunieron para avanzar.

El Chelo está ligado a la instución hasta diciembre de 2024 y en la última Liga Profesional sumó ocho partidos ya que el habitual titular en ese sector fue Luis Advíncula, quien solo se ausentó en un par de ocasiones al inicio del certamen pero luego tuvo casi asistencia perfecta.



En tanto, el caso de Barco es distinto. El juvenil viene dando que hablar desde hace tiempo por sus actuaciones en Reserva y es una de las mayores promesas del club. Sin embargo, solo jugó tres partidos en Primera desde su debut a mediados de 2021.

Además, el último tiempo perdió terreno en la Reserva debido a que un traumatimos en el pie lo obligó a ausentarse por varios encuentros en la recta final de la temporada. Su contrato finaliza en diciembre de 2023 y las charlas se habían activado hace un tiempo, sin llegar a un acuerdo.