VIDEO: Qué difícil, Pavón

También podríamos contar a Bentancur como propio. Y si la lista se extendia a lo que pudo haber sido y no fue, podríamos sumar a Fabra, que se lastimó en los aprontes. Conclusión: por ahora, los malos tragos para los jugadores de Boca sólo vienen si reportan para la Selección Argentina.

Ustedes dirán, con la poca razón que les queda en estos días tormentosos, que el equipo de Sampaoli tiene problemas más hondos que la suerte de nuestros jugadores. Pero Pavón fue un nombre pronunciado mil veces como un mantra, sin que la obsesión por mentarlo se haya traducido a las corridas que esperamos de él, con el viento soplando sobre las velas de la clasificación.



La intervención de nuestro hombre en Rusia en aquel partido donde nos estrellamos contra los agresivos fiordos islandeses, fue buena. ¿O no? Le hicieron un penal ignorado por quienes manipulan la justicias tecnológica, y el ninguneo lo privó de llevarse algo de gloria en su debut.



Ahora las papas queman y quién puede saber si se podrán sacar, o si habremos de volvernos después de la vuelta del perro bajo la lluvia ácida que -si eso ocurre- se descargará desde los cielos sórdidos que habitan los dioses del periodismo hecatómbico. Pero si las cosas prosperan, como es el deseo de casi todos, tal vez nuestro Pavón ingrese por fin al Hall de la Fama mundial escapando de las patadas africanas, cortándose solo a lo Caniggia y enfrentando al arquero, “sereno en su acción”, para quebrar el marcador como en el tango que tanto le gustaba cantar a Maradona.