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SCHELOTTO

El otro Boca Juniors
El mismo nombre. La misma camiseta. La misma pasión. Y el mismo objetivo.
Aquí en Mar del Plata, donde el equipo de Guillermo buscará hoy empezar a liquidar el campeonato, otro viejo y querido Club Atlético Boca Juniors comenzará a darle forma a su propio sueño de gloria.
El CABJ de Mardel fue fundado el 5 de agosto de 1928 por un grupo de muchachos fanáticos de Boca que, a más de 400 kilómetros del barrio de La Boca y sin la posibilidad de viajar cada fin de semana a Buenos Aires, se plantearon el desafío de defender la camiseta que tanto amaban pero dentro de una cancha. Levantaron con tremendo esfuerzo su primera oficina en la Avenida Juan B. Justo y San Luis, a unas 30 cuadras del hotel donde se hospeda el plantel de Guillermo y a 25 del estadio. Y 89 años después buscan dar por primera vez en su historia el gran salto al Federal C. “Ojalá el Boca de Capital pueda ser campeón y nosotros logremos el ascenso”, dice Oscar Cuesta, director deportivo y secretario de la institución, mientras reserva sus entradas para ver al Boquita más famoso.
Al principio nada fue sencillo. El Boca de la Feliz jugó todos los torneos oficiales de la Liga Marplatense en segunda división y recién logró ascender a Primera en 1951. Tiempo después, mientras el Boca que todos conocemos iniciaba la mejor etapa de sus 112 años de vida, con Bianchi DT y el Melli figura, el otro Boca perdía su sede y parecía bajar la persiana definitivamente. Pero renació. Hoy posee un predio de siete hectáreas en la ruta 88, donde 250 chicos realizan la única actividad que ofrece el club. Sí, el fútbol.
Cuenta la leyenda que en los 70, Alberto J. Armando les inició un juicio a todos los clubes que se llamaran igual y tuvieran los mismos colores que la institución que él presidía. Pero como el Boca de Mardel ya contaba con personería jurídica no hubo caso: sólo fue obligado a cambiar su escudo (es igual al de Boca, pero sin estrellas y una pelotita sobre la sigla CABJ) y a agregarle la terminación “de Mar del Plata” al final de su nombre oficial.
El equipo, formado íntegramente por pibes del club, terminó cuarto en la zona clasificatoria de la liga y mañana iniciará su camino rumbo al Federal C cuando visite a Kimberley, otro de los candidatos al título. Como el Boca del Mellizo, a este Boca que cuenta con 2.500 socios también le fue bien en los clásicos. “Hicimos alguna prueba de jugadores para el Boca de Capital y, si bien hay chicos de acá en clubes de Buenos Aires, ojalá algún día podamos ver a uno triunfando con la azul y oro”, agrega Cuesta.
Puede ser un finde redondo para todo Boca. ¿Habrá filial feliz?
Al principio nada fue sencillo. El Boca de la Feliz jugó todos los torneos oficiales de la Liga Marplatense en segunda división y recién logró ascender a Primera en 1951. Tiempo después, mientras el Boca que todos conocemos iniciaba la mejor etapa de sus 112 años de vida, con Bianchi DT y el Melli figura, el otro Boca perdía su sede y parecía bajar la persiana definitivamente. Pero renació. Hoy posee un predio de siete hectáreas en la ruta 88, donde 250 chicos realizan la única actividad que ofrece el club. Sí, el fútbol.
Cuenta la leyenda que en los 70, Alberto J. Armando les inició un juicio a todos los clubes que se llamaran igual y tuvieran los mismos colores que la institución que él presidía. Pero como el Boca de Mardel ya contaba con personería jurídica no hubo caso: sólo fue obligado a cambiar su escudo (es igual al de Boca, pero sin estrellas y una pelotita sobre la sigla CABJ) y a agregarle la terminación “de Mar del Plata” al final de su nombre oficial.
El equipo, formado íntegramente por pibes del club, terminó cuarto en la zona clasificatoria de la liga y mañana iniciará su camino rumbo al Federal C cuando visite a Kimberley, otro de los candidatos al título. Como el Boca del Mellizo, a este Boca que cuenta con 2.500 socios también le fue bien en los clásicos. “Hicimos alguna prueba de jugadores para el Boca de Capital y, si bien hay chicos de acá en clubes de Buenos Aires, ojalá algún día podamos ver a uno triunfando con la azul y oro”, agrega Cuesta.
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