Los detalles de una reunión decisiva en Boca

La exigencia de unidad de Juan Román Riquelme la semana pasada fue una bomba que explotó en cada sector de la política boquense. Ninguno de los frentes estaba al tanto de lo que iba a declarar el ídolo, aunque todos lo tentaron para que sea parte de su movimiento de cara a las elecciones del 8 de diciembre.

Román tomó una posición neutral hasta el momento y se candidateó como presidente en caso de que haya consenso de todas las partes. Pero tal como se presumía desde que el 10 abrió la boca, resultará imposible que se una el oficialismo, representado por Christian Gribaudo, y la oposición, con Jorge Amor Ameal y José Beraldi, quienes hasta podrían llegar a un acuerdo entre sí para formar una lista única.

Horas después de la aparición pública de Riquelme fue Daniel Angelici quien tomó la palabra y anunció su última jugada como presidente del club. Adelantó que convocaría a una reunión a las 15 agrupaciones políticas de Boca para tratar de limar asperezas y conformar así un bando único como pidió el ex enganche. Claro que desde enfrente consideraron esta propuesta como “oportunista” y la rechazaron.

“La unidad se construye. Por eso rechazamos la convocatoria oportunista, electoralista y desesperada de Daniel Angelici, quien se ha encargado durante estos ocho años de destruir nuestra identidad. En definitiva, no aceptamos ser parte de la foto final de una película de terror, cuyo guión nos llevó a vivir muchos de los peores momentos de nuestra historia institucional”, fueron algunas de las palabras de un comunicado oficial firmado por las agrupaciones y movimientos en los que se apoya Ameal (Frente para recuperar la Identidad Xeneize).



Entonces, ¿quiénes serán los que se reunirán para acatar el pedido de Riquelme desde las 19 en el club?

El oficialismo entiende que son 10 las agrupaciones que se alinean detrás de sus pasos. Las principales tienen como cabezas a los actuales dirigentes que rodean a Gribaudo: Alternativa Boquense es liderada por Leandro Crespi, hijo de Juan Carlos (candidato a vice 1°); Boca es Boca, con Carlos Aguas, secretario general que sustituyó a Gribaudo; Boca La Causa, con Diego Lajst, actual protesorero; Resurgimiento Boquense tiene a Marcelo London, quien podría agarrar la vicepresidencia segunda o tercera; Dale Boca, que llevó a Macri al poder y hoy cuenta con Angelici; Frente Único, con el secretario de Actas Pedro Antonio Orgambide; Arriba Boca de Jorge Luis Bitar, Superboca de Orlando Salvestrini y Por un Boca Mejor de Fabián Parra (estos últimos tres son vocales titulares); y Xeneizes por siempre Boca de José Requejo, otros histórico dirigente oficialista.

La que también acudirá hoy es Boca somos todos Agrupación La Bombonera, que tiene a Pablo Abbatángelo y apoya al candidato Víctor Santamaría, quien declaró: “Como hinchas y socios, debemos pensar en lo mejor para nuestro club. Por eso coincido con Riquelme y creo que es muy importante escucharlo. Necesitamos de todos y todas para recuperar la gloria que Boca se merece. Un Boca unido es imprescindible”. Aunque quizás en posición más neutral que las agrupaciones oficialistas, esta dirá presente. Y con la misma postura acudirá César Martucci, quien no tiene agrupación pero arrastra a varios socios y clama por la unidad dirigencial.



Las tres que están encolumnadas detrás de los ideales de Ameal, quien se consideró desde el inicio como la “verdadera oposición” son: Juntos por Boca, con el propio Jorge Amor, Nuevo Boca de Roberto Digón; y Azul y Oro de Carlos Montero. Estos últimos fueron presentados como aliados en los últimos meses. Cabe recordar que el otro apellido fuerte de esta ola es el de Mario Pergolini, candidato a vice 1°. Y la otra que se negó a sentarse en la mesa es Agrupación Boquense, de José Beraldi. El empresario camionero que en un principio se mostró reticente a negociar ser vice de Ameal, ahora estaría decidido a conformar una sola oposición con él. “Creemos que la convocatoria realizada a las agrupaciones en el día de la fecha es una maniobra para distraer a los hinchas y socios de Boca, por ese motivo no asistiremos. Entendemos que por medio de esta convocatoria se pretende mostrar una actitud que no se tuvo nunca; hace meses que pedimos el diálogo y nadie nos ha siquiera respondido. Hacer lo mismo que antes y esperar resultados distintos es de necio', fueron algunas líneas del comunicado del movimiento de Beraldi.

La cuestión que surge a partir de la convocatoria de Angelici y la negación de un par de los frentes es qué postura tomará Juan Román Riquelme ante este escenario: ¿se mantendrá al margen de la política y centrará sus energías en el homenaje del 12/12?, ¿considerará que la oposición desoyó su pedido de unidad y se aliará con el oficialismo?, ¿o pateará el tablero y se acercará a la dupla que asoma con Ameal y Beraldi?

El mapa político en Boca está prácticamente armado sobre la mesa aunque resta saber en que lugar se ubicará la ficha que tiene el número 10.