La actitud del plantel de Boca que no se vio mientras hablaba Riquelme

El hecho de haber quedado afuera de la Copa Argentina y a un paso de despedirse de la clasificación a la Copa Libertadores 2024 son motivos suficientes para explicar el cimbronazo que significó puertas adentro de Boca la derrota con Estudiantes. Pero si se quisiera retratar esto con imágenes, aquellas que se vieron en el Estadio Mario Alberto Kempes mientras Juan Román Riquelme ponía el pecho y daba una extensa entrevista a TyC Sports es la prueba del caso: el plantel se marchó cabizbajo y en completo silencio.

El vicepresidente se sentó al pie del campo de juego tras el 2-3, más precisamente en uno de los laterales, y dio la cara ante esta complicada situación que atraviesa el Xeneize. El Diez habló largo y tendido, mostró su desazón por no haber podido llegar a otra final y también, antes que nada, valoró el semestre de los futbolistas.

Pero no por eso los jugadores xeneizes optaron, por el otro sector del césped, evadir la zona mixta que había preparado la organización sin prestar declaraciones y dirigirse directamente al micro que más tarde los trasladó para subirse al avión de regreso a Buenos Aires. El motivo de esquivar las cámaras, los flashes y los micrófonos pasó por cómo impactó el resultado internamente.



No había ánimos para dialogar con la prensa, cuentan quienes estuvieron en las entrañas del estadio cordobés y vieron esas "caras largas" por no haber logrado el objetivo principal que le quedaba a Boca. De hecho, la misma actitud tomó el propio Mariano Herrón, que directamente decidió suspender la conferencia de prensa pos partido.

En medio de ese clima de desilusión, el conjunto de la Ribera ya pegó la vuelta y por la tarde se reencontrará nuevamente para retomar las prácticas en el predio de Ezeiza. Godoy Cruz, el próximo domingo en Mendoza, será la última gran esperanza para sacar boleto a la Copa Libertadores (a la espera de otros resultados).