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BOCA JUNIORS

No va más
Román deja de ser jugador del club y no hay indicios de solución. Ni siquiera pautaron una nueva reunión.
Hoy Riquelme dejará de ser jugador de Boca. No se espera una sorpresa de último momento. Ni siquiera un indicio de solución a corto plazo. Las partes -dirigentes y jugador- ya jugaron sus fichas. Pero no hay tiempo para más y el juego terminó sin que haya un ganador.
¿Por qué no renueva el contrato que vence hoy? El interrogante que desvela a los hinchas ya no tiene versiones encontradas, como en el inicio de las negociaciones. En el comienzo de las reuniones (con el Torneo Final a días de terminar) la extensión del vínculo difería entre lo que decían ofrecer y lo que contaban recibir. Mientras la CD hablaba de 18 meses, desde la representación del 10 contaban que lo único oficial era un contrato por un año. Superado dicho punto (le ofrecieron hasta diciembre de 2015), el desencuentro surgió por el pedido de una cierta garantía en el cobro. El tema es que ninguna parte quiere ceder un centímetro.
“Las garantías que pide son imposibles de aceptar en la Argentina de hoy”, le contó a Olé un dirigente de los que toman decisiones. “No le van a ofrecer un peso más”, amplió alguien que vive el día a día xeneize adentro de las oficinas de la Bombonera. Desde el entorno de Riquelme, además de reconocer que está “muy desgastado” por la situación, les resulta increíble que no le reconozcan “el único” pedido que hizo. “Aceptó todo lo que le ofrecieron. De hecho, se juega mucho en cada semestre porque el 50% del contrato lo cobra por objetivos (partidos jugados, títulos obtenidos, entre otros). Lo que quiere es que el monto de sueldo que le ofrecen ahora sea el mismo en diciembre de 2015, y no sufrir la devaluación que le hizo perder muchísimo con el último contrato”, explicaron. Piensan que, al aceptar que la mayor parte de la torta sea por objetivos, el reconocimiento al valor de su sueldo se lo tienen que aceptar -y no ser “comido” por la inflación. Pero los dirigentes no piensan lo mismo.
“No hay ninguna reunión prevista”, coinciden desde ambas veredas. Así planteadas las cosas, el jugador no podrá participar de la primera semana de la pretemporada que ya hacen sus (¿ex?) compañeros. En el juego de poder que parece a punto de terminar, no hay ganadores claros. Riquelme no podrá seguir jugando en el club que lo desea. Y los dirigentes deberán afrontar el costo político de haber dejado ir al mayor ídolo.
“Las garantías que pide son imposibles de aceptar en la Argentina de hoy”, le contó a Olé un dirigente de los que toman decisiones. “No le van a ofrecer un peso más”, amplió alguien que vive el día a día xeneize adentro de las oficinas de la Bombonera. Desde el entorno de Riquelme, además de reconocer que está “muy desgastado” por la situación, les resulta increíble que no le reconozcan “el único” pedido que hizo. “Aceptó todo lo que le ofrecieron. De hecho, se juega mucho en cada semestre porque el 50% del contrato lo cobra por objetivos (partidos jugados, títulos obtenidos, entre otros). Lo que quiere es que el monto de sueldo que le ofrecen ahora sea el mismo en diciembre de 2015, y no sufrir la devaluación que le hizo perder muchísimo con el último contrato”, explicaron. Piensan que, al aceptar que la mayor parte de la torta sea por objetivos, el reconocimiento al valor de su sueldo se lo tienen que aceptar -y no ser “comido” por la inflación. Pero los dirigentes no piensan lo mismo.
“No hay ninguna reunión prevista”, coinciden desde ambas veredas. Así planteadas las cosas, el jugador no podrá participar de la primera semana de la pretemporada que ya hacen sus (¿ex?) compañeros. En el juego de poder que parece a punto de terminar, no hay ganadores claros. Riquelme no podrá seguir jugando en el club que lo desea. Y los dirigentes deberán afrontar el costo político de haber dejado ir al mayor ídolo.
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