¿Boca necesita un arquero para la Copa Libertadores?

La solvencia de Roberto Abbondanzieri a lo largo de toda la edición de 2003. Si hay algo que saben en Boca es que para ganar la Copa Libertadores se necesita un arquero que aparezca en las difíciles, un arquero que pueda ganar un partido desde sus guantes. Y, por ahora, Agustín Rossi no demostró estar en ese nivel. Por eso, en la Ribera no son pocos los que creen que el Xeneize debe ir en busca de un nombre de primer nivel antes del cierre del mercado de pases.

A pesar de que no cometió errores groseros en los dos partidos que disputó durante este verano, frente a Aldosivi y River, el juvenil tampoco se mostró muy afirmado en el puesto: contra el Tiburón recibió dos goles con disparos desde muy larga distancia (en el segundo pareció reaccionar tarde), mientras que en el tanto de Rafael Santos Borré que definió el Superclásico no cubrió el primer palo. En el encuentro restante, contra Godoy Cruz, el que atajó fue Guillermo Sara, quien tampoco hizo méritos como para quedarse con el puesto.

Desde la salida de Agustín Orion, quien ya estaba muy cuestionado para el momento en que dejó el club, Boca no logró encontrar a nadie que se adueñara del arco sin cuestionamientos. Sara tuvo su chance y no convenció. Pasó Axel Werner, quien ni siquiera tuvo tiempo de afianzarse porque estaba a préstamo de Atlético de Madrid. Y luego le llegó la chance a Rossi, quien se quedó con la titularidad desde que llegó al club a principios de 2017 y mantuvo siempre un buen nivel, aún sin tener actuaciones memorables en un equipo que está desacostumbrado a ser dominado por sus rivales.

Pero ahora, a poco más de un mes del debut en la Copa frente a Alianza Lima, las versiones de que el Xeneize irá en busca de un nombre de primer nivel van en aumento y el nombre que más suena es el de Mariano Andújar, por quien la dirigencia ya negoció sin éxito en el verano de 2017, antes de que llegara Rossi. Sin embargo, con menos de una semana para negociar antes del cierre del libro de pases, parece difícil que Boca llegue a tiempo de cerrar una gestión con un arquero de esos que sólo necesitan ponerse el buzo y salir a la cancha. ¿Le alcanzará con lo que tiene?