VIDEO: No te vayas, bicampeón

Benedetto fue el goleador de Boca en la Superliga pese a estar inactivo durante medio año. Pavón, el futbolista más valioso de un equipo que supo explotar su velocidad y lo llevó a la fama y al Mundial. Gago fue el alma máter de un Boca de lujo que desfiló en las primeras fechas y les sacó a sus perseguidores una diferencia de puntos en la cima imposible de descontar. Rossi, más allá de sus macanas, arrancó y terminó bien. Wanchope aportó goles clave en el sprint final. Maroni, la frescura que faltaba cuando Boca la precisaba. Cardona y Nández alternaron buenas y malas pero aparecieron cuando debían: en el clásico. Los gritos de Jara contra Tigre y Pablo Pérez ante Talleres valieron un título y la firmeza y la sobriedad de Magallán lo depositaron en Europa. Ninguno de ellos hubiera sido quien fue para este Boca sin el respaldo de uno de los pocos jugadores irremplazables para Guillermo. Hablamos, claro, de Wilmar Barrios, el colombiano que ya es seguido desde muy cerca por clubes del exterior y aún no tiene cerrado su vuelo de regreso a Ezeiza una vez que finalice su participación en Rusia 2018 con la selección cafetera. El volante partió a su país para iniciar la preparación de cara al Mundial sin haber firmado antes el aumento en el monto de su cláusula de rescisión y en Boca tiemblan. Ante una buena oferta, será muy difícil retenerlo.



Ojo: tampoco es que Wilmar se haya negado a ponerle la rúbrica a la actualización de su contrato porque desee irse del club, aunque sí es verdad que los dirigentes creían que podían tener todo resuelto antes de que Barrios viajara a jugar la Copa del Mundo y eso, entre idas y vueltas, no ocurrió. Las charlas con su agente, Juan Carlos Torres, estuvieron encaminadas hasta los últimos días de abril, cuando, según cuentan, la negociación pasó a segundo plano dado que el equipo del Melli se estaba jugando la vida en la Libertadores y peleaba por abrochar el Bi.

Para colmo, aquellos días fueron bastante turbulentos para Wilmar. Un supuesto dolor muscular lo llevó a bajarse a último momento de los partidos con Gimnasia y Alianza, lo que generó sospechas puertas adentro del club y desató la bronca del propio vicepresidente del club, Rodolfo Ferrari: “Es la tercera vez que a Barrios le duele algo llegando al vestuario, pero en la semana no le duele nada, Parece que tiene algo psicológico”. Royco había sido uno de los directivos xeneizes que acompañó a la delegación en Barranquilla la tarde en que el colombiano acusó una molestia en la último ensayo previo al partido y las suspicacias acerca de que el mediocampista estaba preservando su físico para llegar óptimo al Mundial se instalaron también en el cuerpo técnico, que finalmente decidió incluirlo entre los 11. Barrios fue uno de los pocos que tuvo un buen partido ante el equipo de Teo y cuatro días más tarde jugó los 90’ en el triunfo 2-0 ante Unión, su último partido en Boca. ¿Su último partido en Boca?



Barrios aún no tiene la titularidad asegurada en la selección de Pekerman, pero el buen nivel mostrado en marzo ante Australia podría abrirle un lugar entre los 11. De cualquier manera, lo mas lógico sería que su cotización aumentara durante el Mundial y Barrios pase a ser uno de los jugadores de Boca más buscados del mercado. Y es por eso que la CD seguirá insistiendo con conseguir el autógrafo más preciado de Wilmar antes de que lo vengan a buscar de afuera. La cláusula de rescisión actual es de 16 millones de dólares, mientras que el plan de Angelici y compañía es elevar ese número a 20.

“Estoy muy contento en Boca, no quiero irme. Espero que durante esta semana se arregle mi renovación”. La frase de Wilmar en medio de los festejos por el BI

Por lo pronto, dos conjuntos europeos ya lo tienen en sus planes y analizan acercar una propuesta. El primero es el Betis de España, que busca reforzarse para afrontar la Europa League 2018/19. Y el otro es el Tottenham de Pochettino, quien ya comenzó a armar su plantel de cara a la próxima Champions. Por supuesto, la intención de Boca es retenerlo, de mínima, hasta el cierre de la Libertadores. La única Copa que a Boca le interesa.

No te vayas, bicampeón...