En el certamen doméstico, el Xeneize solo ganó en el debut como local ante Platense por 3-1 pero desde entonces no pudo cortar la seguidilla de caídas que desmejoraron la imagen del equipo. Además del traspié con el Halcón, salió derrotado en su visita a Junín para jugar ante Sarmiento por 1-0 y Tigre lo sorprendió con el mismo resultado en la Bombonera la fecha pasada.

Pero eso no es lo único porque si bien el equipo se metió entre los cuatro mejores de América, en la competencia continental no ganó en tiempo reglamentario. Solo superó a Racing en los penales tras los 0-0 en la ida y la vuelta. Además, el fin de semana pasado enfrentó a Almagro por los octavos de la Copa Argentina e igualó 2-2 tras ir arriba 2-0 en el primer tiempo. Luego, en la tanda de penales Sergio Romero volvió a ser figura y evitó el ruido.



A su vez, en estos últimos seis partidos quedó al descubierto otra falencia del equipo: la falta de gol. Apenas anotó dos tantos ante el Tricolor, pero luego no pudo romper el cero en ningún partido y la falta de contundencia fue uno de los motivos por los que le costó sumar de a tres. Con este panorama, Boca deberá recibir al Verdao el 28 de septiembre en la Bombonera por la ida de las semifinales y el jueves 5 de octubre tendrá la vuelta en el Allianz Parque donde se jugará el año.