La ronda de candidatos para suceder a Arruabarrena

Rodolfo Arruabarrena fue respaldado por los dirigentes antes y después de la final de la Supercopa Argentina que Boca perdió por goleada con San Lorenzo. Sin embargo, los malos resultados del equipo provocó que comenzarán a circular nombres de candidatos para suceder al Vasco. Y en esa lista hay estilos para todos los gustos.

Guillermo Barros Schelotto

El nombre del Mellizo golpeó con fuerza el miércoles, luego de que decidiera abandonar al Palermo de Italia, al no conseguir la habilitación de la UEFA para dirigir. En este mes en el club siciliano, donde dirigió cinco partidos, el ex DT de Lanús podía sentarse en el banco pero no darles indicaciones a sus jugadores. Cuando llegó el rechazó desde el organismo del fútbol europeo, el argentino decidió que era momento de pegar la vuelta después de su corta primera experiencia en el exterior, tras tres años como entrenador en el fútbol argentino. En Boca lo quieren desde que estaba en el Granate y la posibilidad de que esté sin trabajo actualmente seduce a varios dirigentes y se perfila como la primera opción de la CD para suceder a Arruabarrena si no puede revertir la situación.

Martín Palermo

Compañero en la cancha de Guillermo, el Titán genera emociones encontradas. El cariño por la camiseta y el ser ídolo de la hinchada encandilan a varios. Sin embargo, su corta experiencia en clubes menores como Godoy Cruz y Arsenal le juegan en contra. Su cargo en el equipo del Viaducto se terminó después de nueve partidos en el torneo 2015, donde cosechó apenas un triunfo, tres empates y cinco derrotas. De esta forma, desde la idolatría, el Titán se sostiene; desde lo deportivo, pocos creen que pueda ponerse el buzo del DT justo para empezar a jugar una Libertadores. Por el otro lado, también se sabe puertas adentro que Mauricio Macri, omnipresente en las decisiones del club pese a su ausencia, tiene una histórica promesa y relación con Martín Palermo.

Miguel Angel Russo

Es el último DT que salió campeón de América y actualmente se encuentra sin trabajo, después de su paso por Vélez, que terminó el año pasado. Antes de ese paupérrimo torneo en Liniers, estuvo en Rosario Central y cosechó grandes resultados: le dio el ascenso que se le venía negando al equipo y, una vez en Primera, lo clasificó a la Copa Sudamericana. Sin embargo, la derrota con Huracán en la final de la Copa Argentina 2014, lo que hizo que descuidara el torneo local, desembocó en su renuncia. A la semana se fue a Vélez y firmó por dos temporadas, pero la dirigencia rescindió antes su contrato. El recuerdo en Boca ilusiona: llegó tras estar dos años en Vélez para reemplazar a Ricardo La Volpe y se consagró campeón de la Copa Libertadores 2007, el título más destacado de su carrera como entrenador.

Julio Falcioni

Es otro que trae buenos recuerdos, en cuanto a títulos ganados. Reemplazó a Borghi y tuvo como técnico de Boca un invicto de más de 30 partidos sin perder. El 4 de diciembre de 2011, se consagró campeón del Torneo Apertura 2011, con la valla menos vencida en la historia de los torneos cortos y la obtención de 12 puntos de diferencia con respecto al subcampeón. En 2012, logró llegar a la final de la Copa Libertadores, que perdió con Corinthians, y consiguió la Copa Argentina, al vencer a Racing. Pese a clasificar al equipo a la Libertadores, su equipo nunca mostró buen nivel de juego y la hinchada lo insultó en el último partido en la Bombonera, lo que provocó que la renovación que Daniel Angelici tenía pensada para él se cayera. Cuando se lo mencionó entre los posibles sucesores del Vasco, algunos le bajaron el pulgar por sus últimos fracasos en All Boys, la U Católica y Quilmes.

Marcelo Bielsa

Solo es una fantasía de alguien. Su nombre siempre suena con un club o un seleccionado tiene un puesto vacante en el banco. Su última experiencia fue en el Olympique de Marsella, donde los hinchas lo amaron pese a que no logró ningún título. A Francia llegó para estar dos temporadas a partir de la 2014-2015, donde dominó la Ligue 1 durante la primera parte del año pero en la que terminó cuarto, con el único objetivo cumplido de haber logrado la clasificación a la Liga de Europa. No fue suficiente: envuelto en rumores sobre la posibilidad de irse a México para dirigir al seleccionado nacional, el rosarino dirigió apenas un partido de la 2015-2016 y renunció.

Pese a los nombres, un dirigente de peso le confió a Clarín: “Hay que ser serios y bancar al técnico. ¿A quien traemos después? Ahora tenemos DT. Después, veremos”. ¿Entonces? El Vasco tendrá que sacudir fuerte al plantel para despertarlo y que ante Atlético Tucumán llegue el primer triunfo. “Cuando perdés es peligroso, porque no sabés cuando dejás de perder”, recuerda siempre el técnico. Ahora apunta a que una victoria llame a otra. A favor: en la Bombonera, la gente de Boca no se manifiesta con insultos para los suyos. Menos para los nacidos en el club. También hubo un apoyo público de Riquelme (¿irá al estadio?), alguien muy escuchado por el hincha. Pero con eso no basta. Hay que mejorar, ganar y terminar con cualquier especulación. Claro que un éxito ante Atlético Tucumán no cicatrizará una herida que parece profunda. Una herida que nació en estos dos meses. Recuerde: se habla de Arruabarrena, el DT del último campeón del fútbol argentino.